Catalogada por el New York Times como “la metrópoli que lo tiene todo” La Ciudad de México es ideal para perderse entre sus calles o para tener encuentros con el pasado histórico; ofrece rincones bohemios en bares y restaurantes tradicionales que se han vuelto un refugio para viajeros y locales.

Te trasporta a un mundo surrealista con la mixtura de la lucha libre, la majestuosidad del barroco, el lujo de sus palacios y su increíblemente variada vida nocturna donde encontrarás desde excéntricos lugares y típicas cantinas, hasta sitios que ofrecen una probada cosmopolita que es una muestra de las miles de culturas que convergen en esta ciudad. No es gratuito que este catalogada como una de las ciudades más divertidas para visitar.

La Ciudad de México es un destino con un misticismo extraordinario que se despliega en su pluralidad, su folclor y su modernidad; todo se mezcla con sus raíces prehispánicas presentes desde sus fundamentos, como lo muestra la Catedral metropolitana que en sus cimientos lleva la pirámide de Tonatiuh.

Xochimilco

Cuando se viaja a la Ciudad de México, Xochimilco es una opción de esparcimiento, diversión y un singular encuentro con el México antiguo; porque a pesar de su urbanización, varios de sus pueblos originarios conservan rasgos de su cultura tradicional y herencia indígena.

PASEA EN TRAJINERA

También se puede incluir una visita a sus canales, donde se puede navegar a bordo de una de las coloridas embarcaciones llamadas trajineras y disfrutar de comida típica y música local: marimba, salterio, mariachi y norteña.

Chapultepec

Para ir a Chapultepec, decían los abuelos, hay que levantase temprano, ponerse los pantalones de mezclilla, los tenis, una playera deportiva y una buena gorra para el sol,lanzarse a la aventura y darse la oportunidad de observar el México cotidiano.